Guerras Médicas (los griegos llamaban Medos a todos los habitantes de Persia) se le llaman a las luchas que enfrentaron las ciudades griegas contra el Imperio Persa desde el año 490 al 448 A.C.
Causas de las Guerras Médicas
La causa fundamental de la Guerra Médica fue el afán de conquistar Persia y el apego a la libertad que tenían los griegos.
Durante el siglo VI A.C. los persas que estaban dirigidos por los reyes Ciro, Cambises y Darío conquistaron casi todo el Oriente y organizaron un imperio compacto y fuerte.
El Imperio Persa llegó a su apogeo con Darío: comprendió todos los viejos países civilizados del Cercano Oriente, desde India hasta Tracia en Europa.
El Leon Persa |
La dominación persa era benévola pero no fue aceptada por las ciudades griegas de la costa de Asia Menor. Muchos de sus principales hombres, sabios, artistas y comerciantes, emigraron a Grecia donde ejercieron una gran influencia y mostraron la amenaza que significaba Persia con su política de expansión conquistadora.
La causa ocasional de las Guerras Médicas estuvo en la sublevación de las ciudades griegas de Asia Menor.
En el año 499 A.C. Mileto y otras ciudades jónicas se revelaron contra Darío. Tracia las imitó y las ciudades de Atenas y Eritrea apoyaron a los rebeldes enviando barcos y soldados. Sin embargo, Mileto fue destruida e incendiada (494 A.C:) y la escuadra de los jonios aniquilada por los fenicios que integraban el Imperio Persa y deseaban terminar con la competencia comercial de los griegos.
La Primera Guerra Médica (490 A.C.)
En el año 490 A.C. el Gran Rey de los persas Darío, después de reconquistar Tracia, envió 600 navíos y un ejército contra Atenas. La flota atravesó el mar Egeo, sometió las islas Cícladas, incendió la ciudad de Eritrea en la isla de Eubea y se dirigió al Atica desembarcando en la bahía de Maratón.
Atenas debió enfrentar el peligro casi sola, mientras la Asamblea Popular decidió resistir el ataque, los Estrategas resolvieron pedir ayuda a Esparta. Los espartanos aceptaron colaborar en la lucha contra el invasor pero no pudieron acudir en ese momento en defensa de Atenas por motivos de carácter religioso; únicamente la ciudad de Platea envió en ayuda, un ejercito de 1.000 hoplitas. El ejército persa contaba con unos 100.000 hombres.
La batalla se realizó en la llanura de maratón porque, siguiendo los planes del estratega Milcíades, los griegos resolvieron atacar sin demora a los persas aprovechando los flancos montañosos que dominan el llano.
Lo favorable del lugar y el ardor disciplinado de los atenienses que luchaban por su territorio, les hizo derrotar a los persas en una brillante hazaña militar. Luego de esta derrota, los persas regresaron al Asia Menor.
La Segunda Guerra Médica (480-479 A.C.)
El segundo ataque persa se produjo diez años después de la batalla de Maratón y fue organizado por Jerjes, hijo y sucesor de Darío.
Jerjes estaba decidido a conquistar las ricas y poco unidas ciudades griegas por lo que preparó una expedición gigantesca. Jerjes reunió un ejército tal como nunca antes se había visto otro.
El ejército estaba formado por hombres reclutados en todas las satrapías del Imperio: eran persas, medos, babilonios, lidios, egipcios, árabes, etíopes, etc. Sin embargo, los únicos combatientes de verdadero valor militar eran los persas.
Ante la gran amenaza persa, la mayor parte de las ciudades griegas se reunieron en un Congreso en Corinto y resolvieron unir sus fuerzas, defender el territorio a la entrada de Grecia central y dar la jefatura del ejército y de la escuadra a los jefes espartanos.
La segunda Guerra Médica comenzó en el año 480 A.C., Jerjes invadió Grecia por el norte movilizando su ejército a través de Tracia y de Macedonia, en tanto que la flota navegaba paralelamente por el litoral del mar Egeo. Los griegos proyectaron detener al invasor en el angosto desfiladero de las Termópilas, en la entrada de la Grecia central y, si eran vencidos, en el istmo de Corinto que permitía la entrada a la Grecia del sur.
En el desfiladero de las Termópilas 7.000 hombres enviados por el Rey de esparta, pudieron detener durante varios días los ataques persas. Sin embargo, por el desfiladero pasaron los persas y ocuparon la Grecia Central; Atenas fue tomada e incendiada mientras sus habitantes huían hacia el sur, a las islas de Salamina y Egina.
La enorme flota persa, llegó a las costas del Atica frente a la isla de Salamina y allí obligó a la flota griega a presentar batalla. La batalla naval de Salamina fue un gran triunfo de los griegos (y de Atenas en particular) y modificó el plan de ataque de jerjes.
El Gran Rey regresó al Asia Menor, pero dejando una parte de su ejército ocupando el territorio ya conquistado.
Este ejército fue totalmente destruido poco después en la batalla de Platea (479 A.C.) en una acción militar donde se destacaron las fuerzas de esparta especialmente y que terminó con la invasión persa en Grecia. La Hélade quedó, desde este momento, libre de invasores.
Al mismo tiempo la flota griega, en las costas de Asia Menor cerca de Mileto, en Micala, encontró y destruyó una flota persa. Con este nuevo triunfo, Jonia quedó liberada del Imperio y sumó sus fuerzas a la alianza griega.
Desde este momento los persas abandonaron sus ataques a las ciudades griegas; en adelante serán los griegos los que amenazarán constantemente al Imperio para asegurar la completa independencia de los helenos que vivían en las islas del mar Egeo y en las costas de Asia Menor.
Para esta lucha Atenas organizó y dirigió una confederación de ciudades llamada La Liga de Delos.
El alejamiento de las fuerzas persas de Grecia, terminó con la unión que los helenos habían concertado en el Congreso de Corintio.
Importancia de las Guerras Médicas
Las Guerras Médicas tuvieron una importancia fundamental en la Época Antigua. Pusieron un freno al afán conquistador del Imperio Persa y permitieron triunfar el ideal de libertad helénico.
Grecia pudo entonces continuar desarrollando su propia vida política, económica y cultural al margen de la influencia oriental.
Atenas fortaleció además su sistema democrático e inició un período de magnífico esplendor transformándose en la ciudad más importante del mundo griego.
Fuente:
Schurmann, Mauricio - Historia Universal: Prehistoria, Oriente y Grecia