En la segunda mitad del siglo VII A.C., surgió en Grecia la escultura monumental en piedra. La representación de la figura humana en piedra tuvo influencia egipcia.
Las estatuas arcaicas se ejecutaron en piedra, mármol y bronce; estos dos últimos materiales recién se utilizaron a partir del siglo VI A.C.
El tema fundamental de la escultura arcaica es el ser humano joven y hermoso. Los escultores se preocuparon desde un principio, de comunicar la belleza del cuerpo. El principal tipo que adoptaron era el de un joven en pie ("Kouros") en actitud estrictamente frontal, con el pie izquierdo ligeramente avanzado, los brazos generalmente muy pegados a los costados, a veces doblados por los codos, y las manos cerradas, con la piedra sobrante en su interior sin tallar, o apretadas contra el cuerpo.
Kouros - Grecia |
Era la misma concepción usada en Egipto; sin embargo, una diferencia importante consiste en que, mientras las estatuas de piedra egipcias generalmente tenían un pilar de soporte en la parte posterior y llevaban como mínimo un taparrabos; el "kouros" griego se representaba sin soporte alguno y completamente desnudo.
El Apolo Strangford (del nombre de su anterior propietario, Lord Strangford), es un ejemplo excepcional de la escultura de finales de la época arcaica a principios del período clásico, marca la consumación de una evolución de más de un siglo en la escultura del "Kuros". La primitiva rigidez y el formalismo del estilo dieron lugar a una creciente aplicación y observancia del conocimiento anatómico del cuerpo humano.
Apolo Strangford |
Para representar una figura en movimiento rápido, o sea volando o corriendo, los griegos inventaron una postura convencional, con las rodillas semiflexionadas, una de ellas sobre el suelo o cerca de él y la otra ligeramente doblada y con los brazos extendidos a los lados, hacia arriba o hacia abajo.
Tanto en estas figuras como en las semiyacentes, la parte superior del torso se vuelve hacia el espectador, mientras que las piernas se ven de lado, produciendo una marcada contorción de la cintura. Para representar este giramiento del cuerpo el artista griego adoptaba la fórmula oriental, mostrando la parte superior del cuerpo totalmente de frente, las piernas de perfil y la cintura casi siempre cubierta con un lienzo.
Las figuras talladas en resplandeciente mármol blanco, constituyen un buen ejemplo de la primitiva escultura griega. Todas siguen un modelo parecido que pone de manifiesto su proximidad al bloque de piedra cuadrangular.
- La cabeza es cúbica, con los rasgos (ojos, boca y oídos) estilizados, tallados en bajorrelieve. El cuerpo tiene cuatro lados.
- La columna vertebral es casi completamente recta. La parte más saliente de la espalda está más arriba que la del pecho.
- El antebrazo está vuelto hacia arriba mientras que el puño, cerrado, se gira hacia el cuerpo. Surcos, protuberancias y abultamientos sirven para indicar los detalles anatómicos en la superficie del bloque.
- El músculo abdominal tiene tres o más divisiones transversales encima del ombligo, en lugar de las dos que se ven en el natural. No hay protuberancia alguna en las caderas y las rodillas, muestran el esquema más o menos simétrico característico de Egipto.
- Los tobillos son completamente verticales.
- Los pies están firmemente clavados en el suelo; sus dedos son largos, a menudo inclinados hacia abajo, con las patas decrecientes, formando una curva continua.